Y esto que leéis es un autentica realidad, aunque pueda sorprender a alguno de mis lectores. Lo podéis comprobar al final de este post, en el testimonio que nos ha dejado nuestra paciente María José. Ella como cuenta tuvo un accidente escalando, lo que la produjo una fractura del cuerpo del astrágalo y posterior necrosis. Como otros pacientes fue dando tumbos de médico en médico, hasta que vino al IICOP. Desde el primer día le dijimos que volvería a caminar y mover su tobillo, pero a diferencia de muchos pacientes que no creen lo que les decimos hasta que se convencen, ella si confió en lo que la dijimos.
Claro la proponíamos un tratamiento que nadie le había hablado de el, como era el retirar el cuerpo del astrágalo necrosado, dejando el cuello y la cabeza del hueso, para a continuación crear un nuevo cuerpo a partir de un injerto de la cresta iliaca posterior de la propia paciente. Con estos conseguimos recuperar la altura perdida al dañarse el astrágalo, realizando una doble fusión de la parte de atrás del pie. Esto es, fijar las dos articulaciones en las que interviene el astrágalo y que se dañan por la necrosis.
Pero además nos sirve para que en una segunda cirugía, retiremos la artrodesis de tobillo y tengamos una base solida donde asentar una prótesis de tobillo Inbone 2, que devuelva nuevamente la movilidad de esta articulación.
Hace unos días un compañero me contaba que había asistido a un curso y que la conclusión que había sacado es la falta de innovación, la repetición de los temas que se hablaban y el ignorar la existencia de ciertas lesiones que no interesan. Y estoy de acuerdo se siguen hablando de las mismas cosas que hace 30 años sin que apenas se haya cambiado nada, surgen nuevas técnicas como por ejemplo las tendoscopias, que no valen para nada, ya que si un tendón está dañado, no quitan las causas que lo ha producido. Y tantas cosas dirigidas por intereses no médicos.
Por eso, la medicina que nosotros practicamos si es innovadora, no nos conformamos con dejar fijo un tobillo, después de una necrosis de astrágalo, con un acortamiento a veces de más de dos centímetros de la pierna. Queremos y ofrecemos algo más y es que los pacientes que han sufrido esta lesión, vuelvan a caminar con su tobillo movil, después de haberles implantado una prótesis de tobillo Inbone 2, sobre el nuevo astrágalo que le hemos creado.
Ella está feliz, por volver a su vida normal y es, ha sido y será un buen ejemplo de la innovación en los tratamientos que realizamos.